Dentro de la población destaca la fuente del Caño de Hierro, con pilastra de ladrillo adosada a un muro de mampostería de cuyo frontal sale un caño que vierte sobre un pilar, con pretil de ladrillo, situado sobre el acerado actual al nivel del terreno. Entre las situadas en su amplio término destacan la fuente del Valle, citada en el siglo XIX por Ramírez de las Casas, que se compone de un edificio de mampostería con cubierta a dos aguas, que recoge las aguas del manantial, y cuyo caño sale por el muro occidental protegido por una pequeña construcción de mampostería, vertiendo en una pileta circular excavada en la roca y comunicada con dos largos pero estrechos abrevaderos. Es interesante la fuente Rabigalga, también citada por Ramírez de las Casas, y que conserva dos pilares abrevadero unidos por sus lados menores pero rehechos recientemente con fábrica de ladrillo.